Una cookie, también conocida como galleta informática es un archivo creado para almacenar pequeñas cantidades de datos que se envían entre un emisor (el servidor del sitio web) y un receptor (el navegador del usuario).
Estos pequeños fragmentos de datos se generan en los servidores web y tienen la principal función de enviar las cookies a los diferentes navegadores. Una vez instaladas, éstos envían de vuelta la información recogida sobre el comportamiento del usuario, haciendo que reciba en su navegador un determinado contenido o información.
Tipos de cookie
Existen distintos tipos de cookies, que se diferencian principalmente por el tiempo de duración que tienen en el navegador y según quién las gestiona:
- Temporales o session cookies: tienen un periodo corto de vida, ya que desaparecen una vez el usuario cierra el navegador.
- Permanentes o persistent cookies: rastrean y guardan la información sobre el comportamiento del usuario durante un periodo de tiempo ilimitado. Se mantienen activas aunque se cierre el navegador, pero igualmente pueden borrarse.
- Seguras o secure cookies: son las que almacenan información de forma cifrada para evitar ataques maliciosos de terceros. Éstas se usan solo en conexiones HTTPS.
- Las zombie cookies: se recrean a sí mismas una vez las han borrado. Este tipo de cookie se guarda en el dispositivo en vez de en el navegador con el fin de poder acceder a ellas sin importar el navegador que se use. En muchas ocasiones se consideran una amenaza para la privacidad y seguridad del usuario.